Nación, sociedad y utopía en el romanticismo mexicano (2005), de Carlos Illades. En el presente libro, el historiador Carlos Illades disecciona los aspectos sociales del romanticismo mexicano, partiendo de la idea de que este estilo artístico contribuye, en innumerables casos, a la forja de la cultura nacional. Analizando la vertiente social y política del mismo, el autor establece contactos temáticos entre algunos de los escritores más representativos del siglo XIX (Ignacio Manuel Altamirano, Luis G. Inclán, Manuel Payno, Leandro J. Valdés, Guillermo Prieto, Ignacio Ramírez, Vicente Riva Palacio, Francisco Zarco), quienes, en sus obras, representan tipos sociales, promueven nociones de país, brindan concepciones utópicas, entre otros aspectos.
Illades, en efecto, para este propósito toma en cuenta las características principales del movimiento romántico, afirmando que si bien presenta aspectos recurrentes y definitorios, como pueden ser la exaltación de las pasiones individuales o el ejercicio artístico de la subjetividad, se vuelve casi obligatorio entender que existieron "varios romanticismos, acordes con las circunstancias específicas de cada país" y "desligados de una doctrina filosófica precisa" y de una "temática uniforme" que determinase sus posibilidades. Ante semejante dificultad, Illades parte del estudio del campo cultural y se detiene en los planteamientos que muchos viajeros extranjeros hicieron del territorio mexicano en el siglo XIX, la recepción y difusión de los textos, la dinámica de los círculos literarios, el mundo de las editoriales, las revistas, etcétera. Tal estudio le permite distinguir, desde luego, la lógica de nuestro romanticismo: estilo que, de modo precario (la mayor parte de las veces), expresa los anhelos de una clase política, preocupada por definir la fisonomía de la joven república y su moralidad. ("El mensaje social romántico poseyó una fuerte carga moral y moralizante: el recto comportamiento de las personas, la disposición a conducirse conforme a los dictados de la fe y los intereses de la patria.")
La obra es una excelente aportación al entendimiento del romanticismo mexicano, abordado éste desde una perspectiva social que no sólo identifica los estilos o materiales temáticos (como frecuentamente se ha hecho), sino también su adecuación al proyecto constructor del país.
No hay comentarios:
Publicar un comentario